¡HOLA! Especiales
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IN THE BLUE CORNER
UN FENÓMENO LLAMADO AITANA • Como con Taylor Swift, si escribes su nombre en GoogleNews, corres el mismo riesgo que si gritaras “bomba” bajo un glaciar a punto del desprendimiento: las noticias te sepultan como un alud. Porque Aitana ha colgado una foto en la que aparece mediodesnuda por el making de Cuando Hables Con Él; porque en ese tema Aitana recuerda los ojos azules de su ex; porque la han pillado dándose un beso en un restaurante con Plex; porque ha sido capaz de colocar en el Top100 España de singles hasta el interludio de Cuarto Azul; porque ha confesado que vio porno cuando era pequeña; porque la han nombrado hija predilecta de su pueblo, o porque Fendi se ha inspirado en ella para su nuevo bolso… Todo lo de Aitana interesa. Todo lo que hace, piensa y dice es noticia. Incluso cuando “se nos va la pinza” atribuyéndole 17 novios por minuto… Aitana es un fenómeno y de proporciones desconocidas. Pero con una asignatura pendiente (y olvídate ya del Bernabéu): en julio, tiene tres reválidas. Una, en el Olímpico Lluís Companys, de Barcelona, y dos en el Riyadh Air Metropolitano, de Madrid. Va con los deberes hechos. Y no hace falta que te lo digamos: con opciones de Matrícula
LA Princesa POP del • Con Aitana estamos en deuda. Quizás ella no lo sabe, pero hubo alguien en la industria que, cuando la vio, supo que tenía ante sílo que todos estábamos necesitando. Tuvo una epifanía. La revelación. Aquella niña de ojos miel y flequillazo oriental era la respuesta. Porque tenía algo único. Era inocente, deseable, con talento… Era perfecta. Ella sería, por fin, lo que nunca antes habíamos tenido. Y como a Cenicienta, le encajaba el zapato de cristal. O mejor dicho, la corona. Era la Princesa del Pop
DE LA PRIMERA VEZ QUE NOS DISPARÓ AL CORAZÓN • Sacó su voz a discreción con Bang Bang y nos dejó KO. Todos los que vimos aquella Gala 0 de OT —unos 2,5 M más o menos—nos quedamos pegados al televisor. Vale que su actuación, en términos de ejecución (ejem, ejem), no pasará a la posteridad ni será tampoco un ejemplo de perfección vocal, peeeero, en todo lo demás, es y será inolvidable. Y es que, cuando alguien te regala un shock emocional, eso es impulso. Y del bueno. Era un manojo de nervios, entró a destiempo con la música, se inventó el texto… Pensó que la echaban, pero… ¡Nada que ver! Aitana tenía ese je ne sais pas quoi que enamoró al público e iluminó a los jueces con la llama de la clarividencia: era una star. ¿Carisma? ¿Química? ¿Talento natural? Después vendrían Can’t Stop The Feeling, Issues… hasta llegar a Procuro Olvidarte y ese golpe de efecto con el que, de un plumazo, se convertía en la rival más fuerte de quien parecía imbatible: Amaia. Casi lo consigue, Lo Malo y Arde estuvieron a punto de darle un temido pasaporte a Eurovisión
UN “TE AMO” QUE YA NO ESTÁ • “Un 6 de febrero/Un “te amo”/Que ya no está/De lo verdadero/A lo lejano/Tú de qué vas/Fue un invierno en el que fuimos dos/Es más frío cuando no estás tú/Hoy ya no puedo escuchar tu voz/Otra vez sola en mi cuarto azul… Porque todavía te quiero”.
DISCOGRAFÍA sentimental COLECTIVA • “Es innegable que Aitana ha logrado un sonido pop propio. Muy distintivo. El ejemplo perfecto es Nochentera de Vicco: fue un éxito y, entre otras cosas, porque ‘sonaba a Aitana’…”. Son palabras de Héctor Llanos, de EL PAÍS, y nos dan una idea de la envergadura de Aitana como artista y como concepto. Su Cuarto Azul no es un número ordinal asociado a un color. En ella, todo va más allá. Hoy, Aitana es estilo, sonido, ritmo y referencia
PLAYLIST
THE ARTIST • Más allá del fenómeno 360… Aitana es cantante. Es compositora. Es un músico con discurso y palabra. Por eso, vayamos ahora a su safe place, a ese lugar—ya sea en su estudio de grabación o subida al escenario—donde se desarrolla en...